Dijo de mi

Dijo de mí que entibió mi lecho Helado de ausencias, vacante y maltrecho.

Dijo de mí que no dije nada Cuando en un impulso me instaló en su alma.

Pero nunca dijo que buscaba amparo Cuando derrumbada por un desengaño
Encontró refugio en mis pobres brazos Y empapó mi pecho con su largo llanto.

Pero nunca dijo que llegó penando, Que sus orfandades se fueron poblando
De ilusiones nuevas y de un nuevo canto Que desvanecieron antiguos quebrantos.

Dijo de mí que no la miraba, Como si ella fuera poco más que nada.

Dijo de mí que era inconsecuente, Parco y taciturno, cruel e indiferente.

Pero nunca dijo que invadió mi casa Profanando cosas que me son amadas
Mis queridos libros, y entre mis marañas Liberando historias que me son amargas.

Por airearlo todo abrió las ventanas Y dejó que huyeran dos o tres infamias
Que mis soledades tenían guardadas Donde nunca nadie pudiera encontrarlas.

Dijo de mí que la malquería, Y no se dio cuenta lo que yo sentía.

Nunca creí que me abandonara Como se abandona lo que no se ama.

Cuando abrió la puerta me quedé pasmado Como sin conciencia, descorazonado.

La miré a los ojos, casi suplicando, Y a pesar de todo no tendí mis brazos.

Se alejó en silencio y en aquel espacio Me quedé tan solo como un solitario
Con el alma rota en cien mil pedazos, Me miré al espejo y me hallé llorando.

(ALberto Cortes, bajen la version que canta Raphael, es muy wena).

"dar , sin mirar a quien"

Este ultimo tiempo se ha puesto “de moda” ayudar a la gente por medio de algunas pulseritas y correitas de colores vistosos para que todo el mundo sepa quienes son los que ayudan realmente en Chile
Almacenes Paris, coca cola, el hogar de cristo, y un techo para Chile, son sólo algunas instituciones que han optado por esta novedosa estrategia que nos deja cada vez mas vacíos y sin ganas de ayudar.
Yo no me quiero referir en este articulo sobre si es bueno o no ayudar o si la gente que lo hace debiera o no usar estos distintivos, sólo me referiré al hecho que tiene socialmente ayudar, pero no de la manera desinteresada que debiera ser, sino de la forma “interesada” que tiene algunas empresas e instituciones de captar gente de cualquier manera para ganarse así algunos pesos mas, y en donde las personas caen en el juego turbio de la ayudar, acción que por cierto nos hace personas mas vacías, y en donde algunos encuentran un campo fértil para aparentar lo que no son y creer que de esta manera pueden escalar posiciones en esta sociedad consumista.

“no hagan sus buenas obras delante de la gente sólo para que los demás los vean… por eso cuando ayudes a los necesitados no lo publiques a los cuatro vientos, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles para que la gente hable bien de ellos… cuando tu ayudes a los necesitados, n ose lo cuentes ni siquiera a tu mejor amigo mas íntimo, hazlo en secreto.” (Mt. 6, 1-4)

Estas palabras son decidoras si tenemos en cuenta que fueron escritas hace un poco mas de 2000 años atrás. Estoy de acuerdo con la gente que no crea en Dios o como se llame, o en estas mismas palabras, pero si podemos rescatar algo… que estas palabras son justamente lo contrario de lo que se esta haciendo ahora, entonces me pregunto: ¿Qué será lo mejor?

La respuesta está en cada uno de nosotros, y dependerá de los valores y las creencias que tengamos. Pero si hay algo que es cierto en todo esto, si continuamos en esta escalada de aceptar cualquier cosa, ya sea dando plata en los supermercados o comprando correitas para que la gente vea que nosotros somos misericordiosos, la verdad es que estamos apartando poco a poco el verdadero significado que tiene el dar sin importar a quien.